10 hábitos financieros para mejorar tu calidad de vida
Trabajas más horas de lo normal, vives angustiado, sin tiempo para una pausa y descuidas tu salud física y mental, todo esto para tener una mejor vida. ¿Suena contradictorio, no?
Y es que solemos confundir el concepto de calidad de vida con el nivel de éxito que queremos alcanzar, y en ese camino perdemos el foco principal: el bienestar.
Si este es tu caso, entonces continúa leyendo. Conocerás qué es tener una buena calidad de vida, sus tipos, factores que influyen para alcanzarla y 10 hábitos fáciles de aplicar para que inicies el cambio hoy. Comencemos.
¿Qué es la calidad de vida?
Definirlo puede ser subjetivo, porque se relaciona con factores que contribuyen a nuestro bienestar y a esas acciones que tomamos para conseguir el tipo de vida que deseamos.
Sin embargo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) lo resume como ‘la percepción que un individuo tiene de su lugar en la existencia, en el contexto de la cultura y del sistema de valores en los que vive y en relación con sus objetivos, sus expectativas, sus normas e inquietudes’.
¿Qué es el bienestar?
Es un estado de satisfacción que incluye estar bien con uno mismo y con lo que tenemos. Abarca aspectos como el estado de salud mental, el bienestar físico, el éxito social, económico y profesional, además del bienestar emocional.
Tipos de bienestar
Existen 4 tipos de bienestar prioritarios para el ser humano. Veamos cada uno de ellos:
- Bienestar físico: se refiere a que cada uno de nuestros órganos funcionen de manera correcta y en armonía. Para ello debemos llevar un estilo de vida saludable.
- Bienestar mental: es tener plena capacidad intelectual para enfrentar desafíos diarios. Nos hace capaces de aprender, ser productivos y mantener relaciones personales.
- Bienestar social: solía relacionarse con lo material y en los últimos años se movió hacia la interacción. Se asocia a las relaciones sociales y redes de apoyo que establecemos. Esto nos ofrece seguridad y autoestima.
- Bienestar profesional y financiero: el primero se refiere al estado de satisfacción y reconocimiento profesional. Nos mueve hacia nuestros intereses y genera tranquilidad. El económico por otro lado, se relaciona con la fluidez y buen manejo del dinero que permiten satisfacer necesidades y evitar estrés o ansiedad a futuro.
En ambos casos, tanto en lo profesional como en lo financiero, es conveniente establecer un plan de vida y carrera donde puedas priorizar lo que es importante para ti y avanzar hacia tus objetivos.
Elementos que determinan la calidad de vida
La calidad de vida se mide a través de un estudio estadístico donde se analiza el nivel de satisfacción de las personas en relación con los siguientes elementos específicos:
1. Vivienda: debe contar con instalaciones básicas y seguras y tener al menos una habitación cada dos personas. El costo de mantenimiento debe rondar el 21% del ingreso bruto familiar.
2. Ingresos: lo que gana anualmente una familia después de impuestos y que nos permite invertir en bienes o servicios.
3. Empleo: no solo mide el beneficio económico, sino la estabilidad, la autoestima, el bienestar emocional, las capacidades y competencias de los individuos.
4. Comunidad: se refiere a las relaciones sociales. Se considera que tener tiempo libre para estar con familia, amigos y pareja aumenta las emociones positivas.
5. Educación: generar conocimientos y desarrollar competencias. Una persona con estudios tiene más posibilidades de elevar su bienestar económico y de encontrar un ambiente laboral adecuado.
6. Salud: tener salud física provee seguridad y tranquilidad. Uno de sus indicadores es la esperanza de vida, o tiempo promedio que se vive en una población. Actualmente se estima que a nivel global es de 80 años.
7. Medio ambiente: las personas con acceso a áreas verdes se ven estimuladas a realizar ejercicio físico y actividades que preserven su salud mental. Este factor incluye el acceso al agua y vivir en un ambiente lo menos contaminado posible.
8. Compromiso cívico: incluye la toma de decisiones de los ciudadanos en las elecciones políticas. Se considera que a mayor transparencia, mejor gobierno y esto impacta en la vida de los ciudadanos.
9. Satisfacción: se mide consultando, en una escala del 1 al 10, qué tan satisfechos estamos con nuestra vida. Según la OCDE, el promedio mundial es de 6.5.
10. Seguridad: en los lugares con bajos índices de criminalidad o inseguridad existe más bienestar que en aquellos en los que la violencia está presente.
11. Balance vida-trabajo: las personas que logran equilibrar trabajo y ocio son más felices, y quienes trabajan en un ambiente laboral tóxico viven con mayor insatisfacción.
Como ves, los ingresos forman parte fundamental de una vida de calidad. Para mejorarlos debemos procurar diversificar nuestras entradas económicas,y una vía para hacerlo es a través de las inversiones. En GBM+ podrás encontrar varias opciones y elegir la que mejor se adapte a ti para iniciarte como inversionista.
Tipos de calidad de vida
Para no confundir el concepto de calidad de vida con el de ‘nivel’, es importante conocer su clasificación: de acuerdo con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), se realiza según las condiciones que brinda cada país a sus ciudadanos y se mide en una escala del 1 al 10. Aquí te lo contamos:
Alta
Se determina por las buenas condiciones sociales en las que se desenvuelve un individuo y el alto porcentaje de funcionamiento de las instituciones que lo rodean. Su escala de medición va del 7.0 al 10.
Media
En esta clasificación solo se cumplen algunas condiciones de vida fundamentales para toda la población de un país. Mide factores sociales, económicos, académicos, culturales, de salud y educación. Su escala de medición va del 5.0 al 7.0.
Baja
Se da en países con problemas sociales y económicos que complican la vida de los ciudadanos, y generan insatisfacción. Su escala va de 4.5 a 5.0.
Mala
Al menos una porción de la población carece de condiciones básicas de vida como agua, comida y vivienda. Los niveles de angustia son altos, los sueldos bajos y las oportunidades laborales escasas. La escala para medirlos es del 2.0 al 4.5.
Cómo se relaciona la calidad de vida con la educación financiera
Administrar bien tus recursos financieros es clave para mejorar tu calidad de vida y eso solo lo logras a través de la educación financiera, que te da herramientas para entender cómo funciona el dinero.
A partir de allí, tomas mejores decisiones sobre tus gastos, ahorros e inversiones, lo que impacta positivamente en tu economía y por ende en tu forma de vivir, en el desarrollo de tu círculo más cercano, e incluso, de la sociedad.
Además, te permite construir hábitos saludables en lo económico, que se ven reflejados en tus cumplimientos de metas, en la construcción de un retiro más digno en la vejez, en el crecimiento de tu capital, en fondos de emergencia para afrontar imprevistos económicos y en la tranquilidad de no adquirir deudas malas para tu bolsillo.
10 hábitos financieros para mejorar tu calidad de vida
Para implementar un hábito debemos practicarlo, por lo menos, por 21 días seguidos. Comienza ahora y ten una vida de mejor calidad:
1.- Lleva un registro de tus gastos mensuales: esto puedes hacerlo a través de un presupuesto donde controles tus ingresos y egresos y puedas ver de forma clara cómo distribuyes, ahorras e inviertes tu dinero.
2.- Evita las deudas malas: las deudas malas son aquellas que no te generan rendimientos. Son las que adquieres al comprar artículos o bienes que no son necesarios para tu día a día, tienen corta duración o se deprecian rápidamente. Están muy asociadas con el mal uso de las tarjetas de crédito.
3.- Invierte en tu futuro: esto reduce la incertidumbre económica. Realiza inversiones para generar rendimientos a corto, mediano o largo plazo.
4.- Minimiza los riesgos: diversifica tu portafolio de inversión para reducir los riesgos y obtener rendimientos desde distintas fuentes.
5.- Aprende a negociar: esto te permitirá obtener ventajas en cada una de tus acciones financieras. Podrás negociar precios, márgenes, tasas de intereses en créditos, negociar con proveedores, etc.
6.- Estudia sobre finanzas: ya sabes que la educación financiera es clave para mejorar tu calidad de vida. Lee libros relacionados con finanzas, consulta fuentes especializadas, como en GBM Media, y fórmate en aquello que te parece complicado para que lo comprendas y aproveches mejor.
7.- Planifica: tener un plan financiero puede ayudarte a alcanzar metas a corto, mediano y largo plazo y a enfrentar momentos adversos que impliquen gastos extraordinarios.
8.- Controla los gastos hormiga: estos gastos pueden desviarte de tus objetivos y representar una fuga de capital.
9.- Establece relaciones que te sumen: el ser humano necesita vínculos y las relaciones personales de calidad pueden ayudarte a crecer más rápido en el ámbito económico.
10.- Gasta menos de lo que ganas: esta es una regla que te aportará paz y, lo más importante, te permitirá tener un excedente para ahorrar o invertir.
Para lograr establecer estos hábitos financieros, además de fuerza de voluntad y formación, debes acompañarlos de hábitos personales que te den claridad.
Por eso es importante que realices actividad física, cuides tu salud mental como pilar para tener una buena calidad de vida, disfrutes del tiempo libre en familia, duermas bien y hagas actividades que te ayuden a liberar endorfinas.
Versión original: GBM Media