Qué saber sobre la osteoporosis senil
La osteoporosis senil es la pérdida ósea que resulta del envejecimiento. Puede que no cause síntomas al principio, pero puede provocar fracturas y dificultad para moverse.
La osteoporosis senil causa pérdida de masa ósea y se desarrolla a medida que el adulto envejece. Puede debilitar los huesos y aumentar el riesgo de fracturas y otras lesiones.
Este artículo analiza los síntomas, las causas y los tratamientos de la osteoporosis senil.
¿Qué es?
La osteoporosis hace que la masa ósea y la fuerza disminuyan. Esto aumenta el riesgo de fractura de huesos.
La osteoporosis senil es un tipo que resulta del envejecimiento y, por lo general, comienza a los 70 años.
La osteoporosis puede deberse a una variedad de factores. Se vuelve más común a medida que las personas envejecen y, en particular, durante la menopausia. «Osteoporosis posmenopáusica» se refiere a la pérdida ósea después de la menopausia.
Cualquier adulto mayor puede desarrollar osteoporosis senil.
Los síntomas de la osteoporosis senil
Esto puede no causar síntomas al principio. El primer signo puede ser un hueso roto o una fractura vertebral, que es el colapso de una vértebra de la columna.
Los síntomas de una fractura vertebral incluyen:
- dolor de espalda severo
- pérdida de altura
- un cambio de postura, que puede resultar de una espalda encorvada o encorvada
La osteoporosis senil puede hacer que los huesos se vuelvan frágiles, por lo que pueden romperse fácilmente. Esto puede significar que un hueso se fractura debido a algo que no rompería un hueso sano, como:
- una caída menor, como una caída desde una altura de pie
- agachado
- levantamiento
- tosiendo
Las personas con osteoporosis senil suelen experimentar una pérdida progresiva de masa ósea. En este caso, los efectos empeoran con el tiempo.
Causas y factores de riesgo
Las personas experimentan pérdida de masa ósea y un ritmo más lento de crecimiento óseo a medida que envejecen. Una disminución de la masa ósea significa que los huesos pueden debilitarse con el tiempo, lo que aumenta el riesgo de osteoporosis senil.
Cualquiera puede desarrollar osteoporosis senil, pero es más común y, a veces, más grave en las mujeres, debido a cambios hormonales, como los rápidos cambios en los niveles de estrógeno que resultan de la menopausia. Los hombres experimentan una reducción más gradual de la testosterona a medida que envejecen.
Los factores de riesgo para la osteoporosis senil, más allá del envejecimiento, incluyen:
- Tamaño corporal: las personas con huesos más pequeños o más delgados tienen un mayor riesgo de osteoporosis.
- Raza: las mujeres blancas y asiáticas tienen un mayor riesgo de osteoporosis que las mujeres afroamericanas y mexicoamericanas. Los hombres blancos también tienen un mayor riesgo de osteoporosis que los hombres afroamericanos y mexicoamericanos.
- Antecedentes familiares: la osteoporosis es más común en personas con antecedentes familiares de osteoporosis o fracturas de cadera.
- Dieta: una dieta baja en calcio, vitamina D o proteínas puede aumentar el riesgo de osteoporosis.
- Factores de estilo de vida: los niveles bajos de actividad física, el consumo excesivo de alcohol y el tabaquismo pueden aumentar el riesgo de osteoporosis.
Los Institutos Nacionales de Salud (NIH) informan que las siguientes afecciones médicas también pueden aumentar el riesgo:
- condiciones endocrinas, que afectan la producción o liberación de hormonas
- enfermedades gastrointestinales
- artritis reumatoide
- algunos tipos de cáncer
- VIH
- anorexia nerviosa
- SIDA
Los NIH también observan que el uso prolongado de algunos medicamentos puede aumentar el riesgo de osteoporosis. Estos medicamentos incluyen:
- glucocorticoides y hormonas adrenocorticotrópicas
- inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina, un tipo de antidepresivo
- inhibidores de la bomba de protones
- tiazolidinedionas para la diabetes tipo 2
- medicamentos antiepilépticos
- terapia hormonal para el tratamiento del cáncer
Tratamiento
El tratamiento para la osteoporosis senil puede incluir:
Ejercicio
Los ejercicios regulares con pesas pueden mejorar la salud de los huesos. Los ejemplos incluyen caminar, nadar, bailar, jugar tenis, hacer pesas y subir escaleras.
Estas formas de ejercicio pueden ayudar al aumentar la fuerza, la coordinación y el equilibrio. Esto reduce el riesgo de caídas y puede facilitar la realización de las tareas diarias.
Prevención de caídas
Las siguientes estrategias pueden ayudar a prevenir caídas de:
- hacer ejercicio con regularidad
- hacerse exámenes oculares y auditivos periódicos
- saber si algún medicamento está causando efectos secundarios como somnolencia
- dormir lo suficiente de calidad
- limitar o evitar el consumo de alcohol
- hacerse controles periódicos de la presión arterial
- usar dispositivos de asistencia, como un bastón, cuando sea necesario
- tener especial cuidado al caminar sobre superficies mojadas o heladas
- usar zapatos antideslizantes de tacón bajo, incluidas pantuflas con suela antideslizante
Es importante informar a un profesional de la salud sobre cualquier caída. Pueden hacer los ajustes necesarios a un plan de tratamiento y brindar orientación sobre la prevención.
Calcio y vitamina D
Tener una dieta con suficiente calcio y vitamina D es importante para prevenir la pérdida de masa ósea. Una persona puede agregar alimentos y bebidas ricos en calcio a su dieta, como:
- verduras de hoja verde oscuro, como la col, el bok choy y las hojas de nabo
- brócoli
- productos lácteos bajos en grasa
- sardinas y salmón
- alimentos y bebidas fortificados con calcio, como leche de soja, jugo de naranja y cereales
La piel absorbe la vitamina D a través de la luz solar. Algunos alimentos también contienen vitamina D, como:
- pescados grasos y aceites de pescado
- yemas de huevo
- hígado
- alimentos y bebidas fortificados con vitamina D, como leche y cereales
Cualquiera que no esté recibiendo suficiente vitamina D puede necesitar un suplemento.
NIH recomienda las siguientes cantidades diarias de calcio y vitamina D para los adultos mayores:
- Hombres de 51 a 70 años: 1000 miligramos (mg) de calcio y 600 unidades internacionales (UI) de vitamina D por día
- Mujeres de 51 a 70 años: 1200 mg de calcio y 600 UI de vitamina D al día
- Todas las personas mayores de 70 años: 1200 mg de calcio y 800 UI de vitamina D por día
Medicamentos
Ciertos medicamentos pueden ayudar a ralentizar o prevenir la pérdida ósea en personas con osteoporosis senil. Algunos ejemplos de estos medicamentos incluyen:
- bisfosfonatos
- calcitonina, después de la menopausia
- terapia hormonal, después de la menopausia
- un análogo de la hormona paratiroidea
- un inhibidor de la esclerostina
Prevención
Algunas estrategias para prevenir la osteoporosis senil pueden incluir:
- mantenerse físicamente activo
- hacer ejercicio con pesas con regularidad, como tenis, baile o entrenamiento con pesas
- mejorar el equilibrio a través del tai chi o el yoga, por ejemplo
- comer una dieta rica en calcio y obtener suficiente vitamina D
- evitar fumar y el consumo excesivo de alcohol
- tomar medidas para reducir el riesgo de caídas, como las descritas anteriormente
Panorama
La osteoporosis senil provoca pérdida de masa ósea, lo que aumenta el riesgo de fracturas. Las estrategias de tratamiento y cuidado personal pueden retrasar la progresión, ayudar a prevenir la debilidad ósea y reducir el riesgo de fracturas.
Los cambios en el estilo de vida y la dieta también pueden proteger contra una mayor pérdida ósea y reducir el riesgo de caídas.
Cuándo contactar a un médico (GERIATRA O ENDOCRINÓLOGO)
Informe a un profesional de la salud sobre:
- un hueso roto, incluso si es por una caída menor
- cualquier cambio de postura, como agacharse o encorvarse
- dolor de espalda
- pérdida significativa de altura
Resumen
La osteoporosis senil es la pérdida ósea que resulta del envejecimiento. Puede desarrollarse en cualquier adulto mayor, especialmente en los mayores de 70 años.
Una fractura por una caída o lesión leve puede ser el primer signo de osteoporosis senil. Los medicamentos y los cambios en la dieta y el estilo de vida pueden ayudar a prevenir una mayor pérdida de masa ósea. Tomar medidas para prevenir caídas también es clave para reducir el riesgo de fracturas.
Versión original: Medical News Today