Cómo hacer de una vida larga una vida mejor también

• Un análisis de la División de Población de las Naciones Unidas muestra que, a nivel mundial, la esperanza de vida promedio aumentó de 46,5 en 1950 a 71,7 en 2022.
• Para una vida larga y de mayor calidad, se requiere bienestar tanto financiero como físico.
• Desde el cuidado de familiares mayores hasta una mayor probabilidad de cambios profesionales y de capacitación, el desafío de garantizar que una vida más larga sea una vida mejor no puede ser responsabilidad de un solo grupo.
• Requiere los esfuerzos combinados de individuos, empleadores, gobiernos y proveedores de servicios financieros.

La esperanza de vida ha aumentado de manera constante durante décadas y las personas viven más que nunca. Un análisis de la División de Población de las Naciones Unidas muestra que, a nivel mundial, la esperanza de vida promedio aumentó de 46,5 en 1950 a 71,7 en 2022.

Esta mayor longevidad refleja positivamente el progreso que hemos logrado como sociedad y los avances que hemos visto en materia de salud, ciencia y tecnología en las últimas décadas. Sin embargo, debemos recordar que vivir más no es un fin en sí mismo. Sí, la gente quiere vivir más, pero, fundamentalmente, quiere vivir más y mejor.

Los desafíos para lograrlo son considerables, como se describe en Living Longer Better: Understanding Longevity Literacy, un nuevo estudio del Foro Económico Mundial y Mercer. Para alcanzar una determinada calidad de vida en la vejez, se requieren esfuerzos significativos por parte de las personas, los empleadores, los proveedores de servicios financieros y los gobiernos.

Las implicaciones de vivir una vida de mayor calidad durante más tiempo son complejas y afectan tanto al bienestar financiero como al físico. Para financiar una vida más larga, se necesita una inversión continua en el desarrollo de habilidades y en opciones de trabajo flexibles para nuestra fuerza laboral global. Las oportunidades para seguir aprendiendo y trabajar de manera diferente a medida que las personas envejecen serán cada vez más importantes.

Hoy, como es probable que las personas vivan más que las generaciones que las han precedido, deben considerar su propia salud y la salud de los familiares a los que puedan tener que ayudar en la vejez. Dos tercios de los encuestados por el Foro Económico Mundial y Mercer esperan tener que proporcionar cuidados físicos a familiares mayores en el futuro, mientras que más de un tercio en general espera tener que proporcionar apoyo financiero.

La situación financiera de las personas hoy en día es muy diferente a la de generaciones pasadas. Los días de los planes de pensiones con salario final y con beneficios definidos están llegando a su fin, y se acepta ampliamente que los sistemas de pensiones estatales existentes en muchas de las economías más grandes y ricas del mundo son insostenibles.

Las personas están asumiendo una responsabilidad mucho mayor por su futuro financiero. Sin embargo, es preocupante que el 55% de los encuestados reconozca que no ha ahorrado lo suficiente o que no sabe cómo desarrollar la resiliencia financiera y alcanzar los niveles de ingresos necesarios para la jubilación.

Esto es particularmente preocupante si se tiene en cuenta que el 44% de los encuestados menores de 40 años indicó que le gustaría dejar de trabajar cuando tenga 60 años o incluso antes.

En este contexto, la dificultad que enfrentan las personas para encontrar asesoramiento financiero confiable y de confianza se vuelve aún más aguda. Las personas menores de 40 años tienen ocho veces más probabilidades que las generaciones anteriores de buscar asesoramiento financiero en las redes sociales. Los datos muestran que el 42% de la Generación Z sigue y compra en cuentas de TikTok. Sin embargo, el sector de los servicios financieros no está siguiendo el ritmo de los hábitos de compra generacionales. En diciembre de 2022, los bancos más populares del Reino Unido y Estados Unidos no tenían ningún contenido de TikTok para atraer e informar a las generaciones más jóvenes.

A medida que las necesidades individuales y los niveles de alfabetización financiera van evolucionando con el tiempo, existe un claro imperativo de ofrecer asesoramiento personalizado y de alta calidad en lugar de un enfoque único que conducirá a peores resultados. Los gobiernos y los empleadores son actualmente los que mejor pueden cumplir con este imperativo, ya que ambos llegan a toda la población de personas que perciben ingresos activos y son relativamente confiables como fuentes de asesoramiento. Los proveedores de servicios financieros del sector privado también tienen un papel cada vez mayor que desempeñar.

Cómo vivir una vida larga y saludable

Es importante tener en cuenta que vivir mejor implica mucho más que una jubilación cómoda. El modelo de vida en tres etapas (escuela, trabajo, jubilación) está cada vez más obsoleto. Es cada vez más común que las personas tengan una vida de varias etapas, entrando y saliendo de la fuerza laboral, cambiando de carrera, haciendo pausas en la carrera, capacitándose y volviendo a la escuela, por ejemplo. El camino puede no ser lineal y puede variar mucho según las necesidades y los deseos individuales. Las políticas, prácticas y modelos de empleo aún no están alineados con este cambio.

¿Qué significa todo esto en la práctica? El desafío de garantizar que una vida más larga sea una vida mejor no puede ser responsabilidad de un solo grupo. Requiere los esfuerzos combinados de individuos, empleadores, gobiernos y proveedores de servicios financieros:

• Las personas pueden trabajar para desarrollar una idea realista de lo que se puede lograr en relación con sus objetivos, comprender los factores que afectarán la expectativa de vida saludable (mejor) y trabajar para mejorar esas áreas si es necesario. Las soluciones de salud digital más accesibles y la tecnología portátil pueden ofrecer una solución rápida en este caso. El uso proactivo de programas de detección de salud también es particularmente eficaz.
• Los empleadores pueden implementar disposiciones para ayudar a sus empleados a lograr mejores resultados a largo plazo, en particular cuando se trata de un modelo de vida de varias etapas. Los programas de jubilación flexibles y por etapas son una adición de rápido crecimiento al modelo de empleo, duplicando su uso desde los niveles previos a la pandemia. Un mejor apoyo a la educación financiera está ganando terreno como beneficio para los empleados. El trabajo flexible, ahora generalizado, también ofrece nuevas oportunidades para que las personas extiendan sus carreras (y su potencial de ingresos) al tiempo que se adaptan a las responsabilidades que puede traer la vida posterior. Los gobiernos tienen un papel fundamental a la hora de garantizar que existan suficientes funciones de apoyo para protegerse frente a posibles problemas, como el cuidado de personas, que podrían afectar a la calidad de vida. De hecho, la Directiva 2019/1158 de la UE introduce el derecho a tomarse una licencia por cuidados de hasta cinco días laborables al año. La directriz no impone una obligación de pago por parte del empleador durante la licencia por cuidados, pero recomienda que los Estados miembros introduzcan una regulación de este tipo. El Reino Unido acaba de promulgar una legislación a este respecto. Se trata de un pequeño pero importante paso adelante en el ámbito sumamente complejo de cómo proporcionar cuidados en la tercera edad de manera eficaz, y otros países deberían tomar nota.
• Los proveedores de servicios financieros pueden individualizar y promover activamente el asesoramiento y las recomendaciones para que se adapten a los diferentes hitos y etapas de la vida, en lugar de adoptar un enfoque universal. Es necesario avanzar más en este ámbito, por ejemplo, mejorando las recomendaciones para que las mujeres aborden la brecha de género en las pensiones, que es de casi el 50 % en algunos países.

En Mercer, trabajamos en estrecha colaboración con corporaciones y gobiernos para ayudar a orientar y desarrollar enfoques, marcos y plataformas que puedan apoyar a las personas y promover el bienestar, aumentar la flexibilidad y brindar las herramientas necesarias para ayudar a los empleados a vivir una vida más larga, mejor y más plena.

Las experiencias inevitablemente varían, ya sea una corporación tecnológica multinacional, un líder de servicios financieros o una marca minorista de lujo, pero es alentador ver que las organizaciones ahora están tomando medidas, trabajando en el tipo de asociaciones que creemos que ofrecen la mejor solución para reflejar los desafíos de vivir más y mejor que tenemos por delante.

Versión original: World Economic Forum